Hoy el reto del amor es escuchar la primera intuición y llevarla a cabo

Escrito el 29/07/2021
Vive de Cristo


Hola, buenos días, hoy Israel nos lleva al Señor. Que pases un feliz día. 

¿AVISPAS?

Cada vez que voy a regar me pasa lo mismo: llego toda decidida a la boca de riego donde está conectada la manguera y, conforme voy a abrirla, veo sobrevolar varias avispas alrededor. Esto de los bichillos no es lo mío, me dan miedo y, sobre todo, respeto, porque no quiero que me piquen. 

Se me despierta la tentación de dejarlo e irme, sin embargo, en ese momento sé que tengo que armarme de valor e intentar abrirla como sea, con la mano, con el zapato o intentando espantarlas un poco moviendo la manguera. Después, cuando riego, ya ni me acuerdo de las avispas, y estoy feliz de poder haber llegado a lo que quería hacer. 

En cierto sentido me doy cuenta de que esto mismo me pasa muchas veces al día: cada vez que se me presenta la ocasión para servir, parece que me asaltan las avispas de mis justificaciones, como invitándome a no entregarme en las cosas más sencillas. 

Otras veces, cuando tengo que tomar una decisión, me asaltan las avispas del miedo que parecen querer alejarme de ahí y darme la vuelta sin tomarla. 

O cuando llega la hora de sentarme a estudiar… parece que hay mil avispas rodeando mi silla, tantas como ideas que se me ocurren de cosas que podría hacer en ese rato de la tarde… y así podría seguir enumerando un montón de cosas. 

Dándole vueltas a aquello en la oración, el Señor me volvió a recordar lo que desde el principio me han ido enseñando: que, en muchos casos, en la primera intuición es donde está el Señor, pero luego somos nosotros los que lo apañamos y le damos vueltas para intentar “seguir buscado” la voluntad del Señor, aunque más bien buscamos inconscientemente algo que nos encaje más a nosotros. 

Pero también todos tenemos la experiencia de la felicidad que da el lanzarnos a abrir ese grifo, el tomar al vuelo esa primera intuición, y, por el fruto que produce en nosotros y a nuestro alrededor, nos damos cuenta de que Él estaba detrás. 

Hoy el reto del amor es escuchar la primera intuición y llevarla a cabo. Cristo se alegró de ver que los que le entendían y acogían mejor eran los sencillos, y es que simplemente se abrían a Él sin darle demasiadas vueltas. Hoy deja todo en Sus manos, y no dejes que ninguna avispa te impida seguir Su Voz. 

VIVE DE CRISTO

¡Feliz día!